martes, 25 de febrero de 2014

La Excepción que confirma la Regla

Esta frase, habitualmente escuchada en Uruguay (lo aclaro porque este blog es internacional) ha sido fuente de incesantes frustraciones hacia mi persona. En repetidas ocasiones, han usado en mi contra este vil argumento, que suena tan verdad, que da rabia, porque si uno lo piensa, no tiene sentido, ningún sentido. Y muchas veces ha sucedido que uno convencido de su postura intenta discutir al respecto, pero choca contra esta máxima divina, este axioma inventado por vaya uno a saber quién, en tiempos inmemoriales. 
Hace unos días, charlando con Fer (algunos recordarán su pasaje por Dado de Tres en el post sobre los bondis) me comparte su odio por tal frase, pero me da algo mucho más valioso que el hecho de no sentirme solo en esta cruzada: me dice que investigó, y que esta frase está MAL TRADUCIDA.
Sí! Está MAL! Todos los que la usaron para ganarme discusiones, PERDIERON! GILES! VAMO PEÑAROL!!!!!!!!!

Así pues, resulta que la solución a nuestras penurias estuvo siempre bajo nuestras narices, es decir, en Wikipedia. Aquí (quién sabe desde hace cuánto) explica que esta frase deriva del latin "exceptio probat regulam in casibus non exceptis" lo cual se traduce como "la excepción confirma la regla en los casos no exceptuados". Esto, que parece una redundancia tonta, está bien explicado en el ejemplo de Wikipedia: "Prohibido aparcar los domingos" (la excepción) implica que se puede aparcar el resto de la semana (la regla).

De todas maneras, no deja de ser una terminología del mundillo jurídico, el cual, oh casualidad, ya desde la época antigua se contradice con el mundillo lógico (del cual lamentablemente tengo puesta la camiseta). Porque eso implica que el domingo no se puede aparcar. Y punto. No dice que el lunes se pueda, o que no se pueda, o que se pueda sólo en horario de oficina. Uno infiere eso, porque es la información más útil, pero a nivel de "Sócrates es Hombre entonces Sócrates no es marciano", no nos da ninguna información adicional concreta.
Así que ahora pueden ir a tocarle timbre a todas esas personas que alguna vez les ganaron una discusión con este argumento barato, palmearles en la espalda y hacerles esto:
Ta, me aburrí de intentar sacarle ese borde blanco, así que se imprime...
EDIT: Pude, gracias tio!
Bastante que recuperé ese emoticon que tanto aprecio
Miliv out

viernes, 14 de febrero de 2014

Medios y Fines

Hace tiempo vengo espiraleando (verbo que significa acercarse en forma de espiral, paulatina e indirectamente) sobre uno o dos temas para hacer un post, pero recién mientras me lavaba los dientes reflexionaba sobre este tema y me dio por transformarlo en texto.
El típico enfoque que se le puede dar a este tema es el maquiavélico, cuestionando acerca de si el fin justifica los medios, o si un fin, si es bueno, por su definición implica buenos medios también. Yo creo esto último, pero no quiero darle el típico enfoque, sino uno más original... (alguno recordará que tengo cierta debilidad por la originalidad, y en realidad puse eso porque tenía ganas de probar los anchors de HTML....)

Lo que pensaba, es sobre eso que dice la gente por ahí, que "lo importante es el camino". Porque claro, cuando uno habla de la vida, no es que lo importante sea el camino, es que es la gracia, porque el destino es la muerte, y la muerte es aburrida. Así que dejando de lado ese ejemplo barato, me parece que el camino o medio es igual o menos importante que el destino o el fin. Es verdad que a veces nos da cierta satisfacción habernos esforzado por algo que conseguimos, y también es cierto que uno valora más ese algo que consiguió y luchó por ello y no se lo dieron en bandeja. Pero para mi eso no alcanza para decir que "lo importante es el medio y no el fin". Y mi argumento es muy sencillo: si alguna vez se esforzaron por algo de una manera absurda, dieron el 220% de sus energías (es decir, el 110% de ida y de vuelta), utilizaron toda su astucia, sus artimañas, su originalidad y empeño en conseguir algo, dieron lo mejor de ustedes y se autoconvencieron de que se lo merecían hace ya varios kilómetros atrás, si siguieron adelante incluso cuando sus seres queridos les dijeron que ya no tenía sentido seguir luchando (y eso que ellos como nos quieren nos tienen una fe a veces más grande que la nuestra), si la impotencia por no saber cómo más hacer por alcanzar eso que tanto desean les hizo rodar lágrimas en las mejillas... Si les pasó todo eso y aún así no lograron su objetivo, seguramente tengan la consciencia más que tranquila de que No se podría haber hecho nada más, pero no me digan que se sienten conformes, de que les alcanza con saber que hicieron lo que pudieron y más, porque no les creo. 

Ahí sí que llegar al fin cambia todo, porque la consciencia tranquila no llena el pedazo de agujero que tenemos dentro, agujero que tiene exactamente la forma de eso que anhelamos, y que no puede ser rellenado por ninguna otra cosa, ni más grande ni más pequeña...

Miliv out.

Jim Carrey, en The Truman Show (peliculón), remando hasta el final...